miércoles, 7 de julio de 2010

La forma de arco del Arcoiris


Imagínate que el fondo del cielo, donde ves el arco, fuera una pantalla de proyección y que el sol es una linterna a espaldas del observador, que eres tú.

Desde el Sol se emiten rayos de luz en todas direcciones y aquellos rayos luminosos que forman un determinado ángulo con la línea que une el Sol con el observador son los que sufren una reflexión total en cada una de las gotas de agua, que sirven de pantalla en el cielo enfrente de tí, de forma que las ves iluminadas.

Además, la luz blanca del Sol sufre refracción, una descomposición en los colores del espectro desviándose cada color un ángulo distinto, por lo que a tí te llegan colores de diferentes sitios un poco más arriba o más abajo. Es como si hubiera un arco iluminado con cada color a distintas alturas, enviando su luz en dirección al observador, hacia tí. Por lo que si tú te mueves, el arco iris que ves es otro, procedente de otras gotas de agua diferentes.